Zenith vs Openbank

Como en un guion de película el encuentro tuvo sobresaltos y alternativas constantes en el marcador. A falta de cinco minutos Zenith iba por delante, pero en apenas tres la empresa de banca le dio la vuelta al marcador para ponerse por delante con apenas dos minutos por jugarse. En la última jugada un ataque a la desesperada de Jorge Vázquez saliendo de su arco daba un balón de oro a Jorge Campoamor para que pusiera el empate definitivo. En los lanzamientos desde el punto fatídico Openbank erró el primero y los publicistas no perdonaron en los tres lanzamientos.

El Polideportivo de La Masó acogía este duelo de octavos de final del Torneo Apertura de 1ª División Plata entre dos grandes equipos. En juego el pase a cuartos y eso se notó desde el primer minuto. El arranque de Openbank fue más intenso, más organizado y sobre todo con una idea clara, combinar para buscar la portería rival. Con una línea de 3 atrás liderada por Juan Antonio Quintana, la labor de creación la dejaban en pies de dos talentos en la zona medular como Roberto Rodríguez y un eléctrico Gonzalo Sáenz. Arriba Roberto Lagares comenzaba a dar muestras de su peligro robando balones peligrosos gracias a la presión alta de todo el equipo. Tuvo Roberto la primera en el primer minuto en una mala cesión de la defensa rival, el balón se marchaba fuera por poco. Zenith no terminaba de acoplarse al encuentro intenso que proponía su rival y apenas podía construir el juego abusando de los balones largos hacia un Miguel Saldaña que luchaba todo lo que podía en la punta de ataque.

El primer gol no tardó en llegar y no se salía del guion marcado hasta ahora, la presión de Openbank hace perder un balón a los locales en una zona peligrosa y Roberto Lagares en esta ocasión no perdona fusilando a Jorge Vázquez. Los visitantes se sentían cómodos en el campo y a punto estuvieron de hacer el segundo tres minutos después. Manuel Fraile hacía la pared con Lagares y disparaba abajo marchándose muy cerca del palo derecho de la portería local. A Zenith no le salía nada y para colmo Miguel Saldaña se lesionaba dejando a su equipo con 6 jugadores al carecer de cambios. Este factor lejos de afectar negativamente al equipo les supuso un aliciente extra y Zenith se estiraba, aprovechaba bien los espacios y circulaban rápido el balón gracias especialmente a la aparición entrelíneas de Jorge Campoamor. El “crack” de los blancos protagonizaba una gran acción en el área marchándose de dos rivales en apenas un palmo, pero su remate era despejado a córner por Chema Contreras. Los publicistas veían como de nuevo los reflejos de Chema evitaban el tanto de Nico Rodríguez tras un gran disparo raso desde una posición algo escorada.

Cuando Zenith mejor estaba, el cuadro visitante asestaba un nuevo golpe, un gran libre directo ejecutado con maestría por Gonzalo Sáenz se colaba por la escuadra de la meta local poniendo el 0-2 en el luminoso. Con el marcador con dos goles de ventaja Openbank recuperaba la iniciativa del juego, Roberto Rodríguez movía a los suyos y Roberto Lagares daba muestras de su peligro con ambas piernas, aún así el protagonista en estos minutos tendría que ser su portero Chema Contreras que salvaba de nuevo a los azules con una gran intervención en una contra a la salida de un córner que José Larrauri con todo para marcar contra todo pronóstico estrellaba en el cuerpo del buen cancerbero visitante que parecía que tenía imán en estos minutos. Quedaba poco para el descanso y Miguel Saldaña volvía para ayudar a los suyos en lo que pudiera, aunque fuera medio “cojo”. Un robo de Jorge Campoamor en la línea de tres cuartos le permitía poner un balón a la espalda de la defensa visitante y allí aparecía Saldaña para marcar el denominado “gol del cojo”. Poco después el colegiado decretaba el fin de la primera parte y nos marchábamos al descanso con todo por decidir.

La segunda mitad arrancaba con los dos equipos decididos a ser protagonistas, Jorge Campoamor dispondría de la primera tras una magnífica cinta en la banda y tras llegar al borde del área cruzar en exceso el balón. La respuesta no ser haría esperar Roberto Lagares salía con un recorte hacia su pierna izquierda y su zurdazo lo escupía el palo derecho de la portería de Vázquez. En estos minutos de ida y vuelta se iba a producir un cambio importante de tendencia, Zenith empezaba a ganar la batalla del medio campo y todos los balones divididos eran para los blancos. Juan Antonio Quintana dejaba el eje de la defensa visitante y esto era algo que aprovechaban los blancos para que Miguel Saldaña jugara más cómodo de espaldas a portería surtiendo de balones a su segunda línea. Repetía gol Miguel Saldaña para poner el empate en un balón sin aparente peligro que se paseaba por el área y llegaba al punta en el segundo palo que no perdonaba. Openbank no daba crédito cuando todo su esfuerzo y dominio se iba al traste minutos después con el gol de José Andrés Larrauri tras una nueva asistencia de Jorge Campoamor.

Zenith le había dado la vuelta al marcador y entraba en el tramo final del encuentro con mejor dinámica. Lagares y Sáenz trataban de levantar a los suyos, Francisco Castellano se esforzaba por secar a Saldaña y con ello la salida de balón de los blancos. El empuje de Openbank tuvo su recompensa y en un córner Salvador Garrigas en un escorzo ponía las tablas a cinco del final. Cuando parecía que nos íbamos a penaltis los visitantes se empeñaron en impedirlo y en una contra Gonzalo Sáenz batía a Jorge Vázquez por debajo de las piernas. Zenith iba a morir en la orilla, pero una jugada increíble de Jorge Vázquez saliendo de su portería y entrando por la banda izquierda le permitía asistir a Jorge Campoamor que ponía el empate y nos llevaba a unos penaltis que como mínimo era un justo premio para ambos equipos por el despliegue y esfuerzo realizado. En los lanzamientos para seguir con los tópicos de que es ahí donde los grandes jugadores fallan, Roberto Lagares se encontraba de nuevo con el palo de la portería de Zenith y los lanzadores locales no desaprovechaban esta oportunidad para anotar sus tres lanzamientos y sacar el billete a cuartos.