J6 – Urbanitae vs Bidaidea

El combinado inmobiliario condena a la firma de ciberseguridad a su sexta derrota consecutiva a pesar de que en algunos tramos los visitantes jugaron destacados minutos. El partido se le puso de cara a Urbanitae a partir del primer cuarto de hora. Mandaban entonces por 3-1, una renta que iban a ampliar en el tiempo restante.

El colegio Alameda de Osuna albergó la disputa de la jornada 6 de la Liga Clausura entre Urbanitae, en su primera aventura en Futbolempresas, y Bidaidea, farolillo rojo que todavía no ha podido abrir su casillero de puntos en este grupo 6. Tal y como marchaba el inicio de batalla, parecía que el escenario de tanteo y miedo a arriesgar de más dominaría mucho más tiempo. Esta dinámica tardaba en romperse exactamente 3 minutos. David Pérez, el crack del partido por acciones como ésta, abría la lata con un disparo lejano. Nadie le saltaba, y éste amagaba y a la tercera le pegaba con determinación. Eduardo Barrantes, su aliado inseparable y dandy, agrandaba la brecha por medio de un disparo de seda. Timoteo Zaragozi la tocaba bajo palos, pero no lo suficiente como para desviar la trayectoria del cuero.

Bidaidea estaba obligado a remar y mucho si quería sacar algo positivo de este compromiso. Antes que el gol, encontraba las sensaciones, una característica importante también en fútbol. Adrián Alba la mandaba a guardar tras recoger un rechace de Tomás Mingote, el portero local. Poco a poco, se iban animando más y más con balón. El encuentro se desarrollaba mucho más en el área de Urbanitae pero tampoco concretaban sus adversarios. Justo cuando mejor parecían estar, el mandoble de Carlos Arteaga los mandaba a la lona. Estaban defendiendo bien en jugada, pero a balón parado sufrían demasiado. Relación causa-efecto que se veía cuando Carlos remataba completamente solo una prolongación de Juan Alonso.

Muy a su pesar, los vestidos en esta ocasión de blanco no recortarían esa distancia en el tiempo restante. Por el contrario, los de verde vivirían de las rentas cual señor feudal. Su mala toma de decisiones en zona de tres cuartos y la no aceleración de las jugadas dejaban con un hálito de vida a su rival. Los últimos compases de la primera mitad coincidían precisamente con los mejores minutos de Bidaidea, pero su falta de pegada les condenaba a marcharse al descanso 3-1 abajo.

Si había una mínima esperanza de remontar o al menos empatar, era erradicada por los locales en los primeros 10 minutos de la segunda mitad. Volvían a infringir daños con el balón parado, esta vez en una jugada ensayada más propia de fútbol que acababa por definir Juan Alonso. El 5-1 sería obra de David Pérez: el bigoleador la colocaba en la escuadra con cierta fortuna, ya que la pierna de Nicolás del Río desviaba ligeramente el balón.

Bidaidea ya no generaría prácticamente amenaza. Prevenidos para no recibir una goleada, se quedaban muchas veces atrás jugadores que debían en teoría ayudar a sus compañeros a la construcción de ataques. El repliegue de Urbanitae tampoco era el mejor del mundo. Ya en este contexto, los defensores de los locales se alzaban victoriosos prácticamente en todos los duelos con los delanteros. Su confianza aumentaba a medida que se imponían en ese registro.

Con la opción de remontada enterrada, la gestión de la ventaja del lado verde sería de suma comodidad. Bajaban 2-3 marchas y, con ello, el telón del partido se cerraba. Bidaidea tendrá que seguir mejorando para empezar a puntuar, mientras que, con 7 puntos, Urbanitae asciende posiciones dentro del grupo 6.