J8 – Statkraft vs Talgo B

Borja Sebastián impidió que los locales se fueran con una goleada mayor con un repertorio de paradas espectacular. También los palos sacaron de quicio por momentos a un Statkraft que se sintió muy cómodo en el verde. Miguel Gómez fue uno de los hombres destacados del encuentro, aunque tuvo que esperar hasta el último minuto para encontrar el premio en forma de gol.

Aunque el marcador indique dominio goleador, lo que se vio en el Municipal de Santa Ana este lunes fue una ‘masterclass’ de fútbol total por parte de Statkraft. Los locales salieron en tromba y no soltaron el pie del acelerador. Talgo B, agobiado, intentaba defenderse acumulando jugadores en zona central para torpedear la circulación de su rival, que encontró la manera de asediar el arco rival.

Un inspirado Borja Sebastián evitó con intervenciones brillantes lo que pudo ser una goleada mucho más abultada. También la defensa, que sacó alguna que otra pelota sobre la línea, y los palos. Miguel Gómez y Diego Núñez asumieron la responsabilidad en la creación y a base de disparos lejanos, fruto de la complejidad que plantea el diminuto campo de Santa Ana. Un disparo lejano de José de Ramón, que fue uno de los más incisivos, lo desvió Borja para finalmente rebotar en el larguero. En apenas 10 minutos, Statkraft ya había estrellado el balón a la madera en 3 ocasiones. Después de José, Nacho Botín y Miguel Gómez estrellaron el balón con el travesaño. Este último se desesperaba en un gesto levantando los brazos y expresando su rabia por no conseguir abrir la lata a pesar del dominio.

Es cierto que los locales apenas conseguían trenzar una jugada más allá de los tres cuartos de campo, pero más por las dimensiones y el planteamiento defensivo de un Talgo B que ni siquiera inquietó el arco rival y que solo salió de su área con alguna arrancada de Gonzalo García, el mejor a excepción de Borja. El gol se pagaba caro y tuvo que ser un disparo lejano de Diego Núñez el que, finalmente, rompiera la igualdad en el marcador. El mediocentro se perfiló para el golpeo con su pierna izquierda, en una jugada que repitió durante todo el encuentro, para mandar el balón al fondo de la red, no sin antes golpear en el palo. Abierta la veda, el recién incorporado Erick Castelán tuvo que poner orden a la falta de pegada local y, en su primer contacto con el balón, definió a las mil maravillas con su pierna izquierda para superar al guardameta.

Mismo guion en la segunda mitad. El asedio se acentuaba con el debutante Alejandro Sánchez, que también interpretaba perfectamente lo que demandaba el partido: soltar el balón rápido y descolocar con la elaboración al conjunto visitante. También Nacho Botín fue clave con su movilidad en todos los sectores. El extremo volvió a toparse con el palo con un disparo espectacular, al igual que Álvaro García, con un remate en un córner que parecía que sorprendería a Borja Sebastián, pero también golpeó llorando en la madera.

Miguel Gómez seguía negado de cara a gol y, cuando lo tenía todo de cara nuevamente, se topó con un defensa cuando ya cantaba su gol. Su mal fario se rompió sobre la bocina y quizá en el peor de los intentos, en un disparo blandito que pilló descolocado al meta local. Antes de este 4-0 definitivo, Nacho Botín había servido el tercero.