J3 – Manolo Bakes vs Ecija

El nueve de Écija logró marcar cinco tantos en un vibrante partido en el que también brilló Carlos Castillo, que anotó un doblete y asistió hasta en dos ocasiones al goleador de la noche.

Dicen que quien entra con buen pie en un partido suele salir victorioso del mismo. Eso mismo ocurrió en el partido entre Manolo Bakes y Écija. No habían pasado siquiera cinco minutos cuando Fernando Prida avisó al guardameta local con un disparo lejano. Prácticamente en la siguiente jugada, Alejandro Rodríguez, con un fuerte y tenso disparo cruzado con la pierna izquierda, consiguió batir a Luis Moreno Campos. Sin embargo, Manolo Bakes apenas esperó un segundo para pelear el resultado a los de rojo. Álvaro Francisco¸ con un potentísimo disparo desde el punto que divide los dos campos, sorprendió a Juan Carlos Guerrero y mandó a las mallas lo que sería el empate a uno.

Con un tanto de pillo apenas dos minutos después de las tablas, Fernando Prida comenzaría su festín particular. Aprovechó una indecisión entre guardameta y defensa central para meter la pierna y poner a su equipo por delante en el marcador (1-2). El delantero siguió intentándolo y hasta en dos ocasiones se encontró con un inspirado hasta el momento Luis Moreno que, sin embargo, no pudo hacer nada para que el nueve rojillo aprovechase un rebote para convertir el uno a tres. Antes de llegar al cuarto de hora de juego, el ariete conseguiría su hat-trick. Robó el balón en el área pequeña a Alejandro López y mandó al fondo de la red el tanto que puso diferencia de tres en el marcador (1-4).

El partido entonces cogió un tono de intensidad elevada, con el árbitro teniendo que parar el encuentro para hacer ver a ambos equipos que tenían que rebajar sus elevadas pulsaciones, que estaban teniendo repercusión en la nula continuidad en el juego. Manolo Bakes aprovechó el desconcierto de estos minutos y puso el dos a cuatro con una gran jugada de Del Valle, quien con una extraordinaria media vuelta, anotó un bonito tanto para acortar distancias.

Fue ya comenzada la segunda mitad cuando, entre la tensión y la exhibición de Fernando Prida, apareció Carlos del Castillo. El jugador de Écija se echó el equipo a las espaldas en un momento de debilidad y anotó un doblete. Primero, con una gran definición al palo corto y después gracias a un rechace al que estuvo atento. Entre tanto, Del Valle seguía con su guerra personal para meter a su equipo en la lucha por el partido y consiguió su segundo gol, que dio esperanzas a los suyos dando un extra de energía que volvió a ocasionar problemas a Écija.

Volvería entonces a aparecer la estrella del encuentro: Fernando Prida. El delantero era un quebradero de cabeza constante para el conjunto de verde y  los visitantes aprovecharon su momento de lucidez para mandarle balones arriba y que se deshiciese de contrarios. En una de estas, sobre el minuto cuarenta, recibió el esférico, lo bajó, dribló a un rival y definió cruzado para sentenciar el partido. Manolo Bakes quiso meterse en el encuentro con un disparo al palo de Carlos Poveda y el gol de  Alejandro Francisco, pero ya era demasiado tarde. El resultado se abultaría un poco más con el tanto final de Prida¸ que aprovechó con maestría una gran asistencia de su socio Carlos del Castillo cerrando el encuentro con un cuatro a ocho que esconde lo difícil y disputado que estuvo el duelo.