J7 – Credit Suisse vs S4G Consulting

Los visitantes no aprovecharon la inferioridad numérica de los primeros minutos de los azules y terminaron perdiendo con contundencia ante un Credit Suisse que en cuanto igualó las fuerzas sobre el césped supo llevar el partido a su terreno.

El encuentro no empezó nada bien para Credit Suisse. Los locales tuvieron que jugar los cinco primeros minutos con cinco jugadores debido a la tardanza de dos futbolistas de la plantilla. Aunque aguantaron muy bien. S4G no aprovechó la ventaja numérica de la que disponía. Tuvieron ocasiones, pero no estuvieron finos dentro del área y no lograron ponerse por delante en el marcador.

El conjunto blanco, fruto de la confianza de la ventaja numérica, no imprimió el ritmo y la intensidad necesaria para desarbolar a su rival. Dio la sensación de que salieron a medio gas, y por eso el cuadro azulón se sintió con cierta comodidad a pesar de estar con una inferioridad numérica de dos jugadores. Defendieron con solvencia ante los ataques estáticos de S4G. Pero el problema lo tenían en ataque. No tenían efectivos suficientes para montar los contragolpes, y eso les puso en muchas dificultades para llegar a campo contrario.

Los dos jugadores del equipo local se incorporaron, y el guion del choque cambió por completo. Con la igualdad numérica, se empezaron a apoderar del juego con un Pablo Carrasco que estuvo fabuloso. Controlaron la posesión y llegaron con más eficiencia al área rival. Y entonces llegó el tanto de Ricardo Ruiz. El jugador azulón se metió muy bien entre los centrales. Un desmarque magnífico que fue indetectable para la zaga de S4G. Recibió un gran pase en profundidad y metió la punta de la bota ante la salida David Gordo. El balón entró en la portería con mucha sutileza dando esta mínima ventaja para los financieros antes del descanso.

La segunda parte fue la prolongación del dominio que Credit Suisse ya había mostrado en el tramo final del primer acto. Siguieron manejando la posesión y llegaron al campo contrario con buenas jugadas por la banda, y con un Pablo Carrasco que seguía siendo un quebradero de cabeza constante. El cuadro blanco estaba contra las cuerdas, y en el minuto 33′ llegó una jugada fatídica para ellos. Joaquín Ramírez tuvo que detener el balón con la mano en la línea de gol para evitar el 2-0. El árbitro señaló penalti, y Luis Arguello lo trasformó de una forma extraordinaria. Lanzamiento directo a la escuadra. No pudo tirar mejor la pena máxima. Imposible para David Gordo.

El 2-0 abrió brecha en el marcador. Dejó muy tocado anímicamente a los visitantes, aunque aguantaron defensivamente bastante bien y evitaron una goleada mayor. Sin embargo, en los minutos finales, el cansancio físico comenzaba a hacer estragos en los jugadores. S4G estaba totalmente entregado y encajó el 3-0. Un golazo espectacular de Pablo Carrasco. Arrancó desde el medio del campo, se plantó en la frontal regateando por el pasillo central, y disparó un tiro ajustado y esquinado. Un tanto colosal ante el que nada pudo hacer David Gordo. El colofón perfecto para la gran actuación individual de Carrasco.

Los visitantes terminaron maquillando el resultado en una jugada muy polémica. Los jugadores de Credit Suisse reclamaron penalti por mano. El colegiado no señaló nada, y S4G anotó en la contra. Una jugada colectiva brillante que Juan Ignacio Ansalas finalizó desde la frontal con un remate por bajo en el primer palo. Sin duda, la mejor acción de los blancos en todo el encuentro en un choque que pudo cambiar de desenlace si hubieran aprovechado la superioridad numérica inicial.