J3 – CDE Berroqueño vs Selectra

Los visitantes se impusieron por 1 gol a 0 en un encuentro marcado por la igualdad entre ambos conjuntos. La soberbia actuación de Eduard Avagyan, portero del equipo, fue clave para mantener el resultado, sobre todo en los últimos minutos, cuando los locales estuvieron a punto de empatar el partido en varias ocasiones.

El fútbol en general es muy desagradecido. Los triunfos se olvidan antes que las derrotas y los fallos permanecen mucho más tiempo en la memoria de los aficionados que los aciertos. Y es peor aun para una posición en concreto: la de portero. Los guardametas siempre han recibido un trato distinto al de los futbolistas de campo. Su plaza es la más difícil de cubrir porque un fallo en esa parcela del terreno de juego es fatal, y cuando tienen una buena acción normalmente se atribuye a un error de rival. Sin embargo, Eduard Avagyan, portero de Selectra, demostró ayer que su posición puede ser el puesto más importante dentro de un equipo. Los visitantes ganaron gracias a que marcaron, pero aun tuvo más responsabilidad en esa victoria el hombre que paró y paró hasta el último minuto, siendo clave en un partido disputado hasta el final.

La historia podría haber sido bien distinta, porque en los primeros minutos de juego Eduard se llevó un golpe involuntario en la cabeza en una acción de juego. Durante unos segundos se dudó de su continuidad en el campo, pero el crack del partido se recuperó para volver al encuentro, y menos mal para su equipo. El duelo fue en todo momento un constante ida y venida, con los dos conjuntos buscando herir al rival. Es cierto que Selectra transmitía más sensación de peligro, pero la intensidad de CDE Berroqueño no le permitía imponer su fútbol ni hacerse dueño del balón. La primera parte transcurrió en ese escenario donde ningún equipo era capaz de superar la última línea defensiva del adversario, por lo que ambos optaron por buscar el gol con disparos lejanos.

Al decretar el árbitro el final de los primeros 25 minutos el marcador inicial no se había movido ni tampoco había estado extremadamente cerca de hacerlo. Quien quisiese llevarse el partido iba a tener que poner un poco más de carne en el asador en el segundo tiempo. Y esta necesidad se notó en la intensidad de los dos conjuntos. Sin embargo, nadie encontraba la fórmula para ordenarse y tener posesiones largas, por lo que las mejores ocasiones llegaban de balones parados y disparos precedidos por jugadas embarulladas. El encuentro parecía que iba a decidirse por una genialidad o por un error, y fue por lo primero. En el minuto 37 Juan Pérez recogió el balón en la frontal del área rival y, tras hacerse hueco, definió con el interior de la pierna derecha al palo más alejado. Disparo imposible para el portero y 0-1 en el marcador.

Con 13 minutos por delante la estrategia de Selectra pasó a dar prioridad a la defensa mientras que CDE Berroqueño empezó a quemar las naves arriba. Los locales vivieron en la recta final del partido su mejor juego, con ocasiones claras para igualar el resultado. Igual contra otro portero lo hubiesen conseguido, pero Eduard Avagyan sostuvo a su equipo aguantando un chaparrón que fue incrementándose según se acercaba el pitido final. Sin embargo, la más clara de los locales no la estropeó el portero, sino el poste. La suerte no sonrió al Berroqueño que, cuando ya cantaba gol, vio como el tiro de Jorge Herranz se topaba con la madera.

Al final los locales murieron en la orilla y se quedaron sin tiempo en un partido que probablemente merecieron empatar, pero ya se sabe que el fútbol lamentablemente no va de merecer sino de hacer, y nadie pudo hacer más que Selectra para llevarse la victoria en este encuentro.