J7 – Bidaidea vs Publicis

Meritorio resultado de la empresa dedicada a la ciberseguridad. Pese a ir cayendo por 1-2 a falta de un cuarto de hora, conseguían remontar gracias a su tesón y capacidad de sacrificio. La entrada de Luis López revolucionó el duelo y el bigoleador se proclamó como el crack de la noche. Publicis Groupe pasó caro su conformismo y se marchó de Alameda de Osuna sin premio alguno.

Duelo de urgencias el que se iba a vivir el lunes post-Semana Santa en Alameda de Osuna, entre dos equipos de la parte baja de la clasificación del grupo 6 de la Liga Clausura. Bidaidea y Publicis Groupe llegaban esperanzados a la cita, conscientes de que gran parte de sus opciones de escalar puestos pasaban por esta cita.

Los publicistas comenzaban mucho mejor la contienda. Apenas contábamos 4 minutos y ya se habían topado con la madera hasta en dos ocasiones, uno de ellos, un precioso disparo desde media distancia a la salida de un córner. Bidaidea no se podía permitir eso ante un rival similar en cuanto a nivel. Igualaba, pues, en intensidad, y empezaba a vivir más en campo rival. La falta de ideas aparecía en escena, aunque a punto estaba el arquero verde, David García, de marcar desde su propia portería con un golpeo envenenado.

A Publicis Groupe le empezaban a surtir efecto los cambios de orientación. Sin embargo, su 1-0 llegaría en forma de transición culminada por Luis López. Aunque en cuestiones de merecimiento, el partido era como mínimo de empate, y éste llegaba por medio de Eduardo Maldonado: no le saltaban a encimarle y éste la colocaba precisa y con mimo al palo izquierdo. Ambos equipos se anularían a continuación en el plano ofensivo. No tanto por incapacidad, sino por una especie de pacto entre caballeros. Habían derrochado muchas energías y querían guardar las restantes para el segundo apartado. Un remate en semifallo de Adrián Alba y una volea al palo de Luis Freyre serían las más claras entonces.

El ritmo seguiría siendo lento en la mayor parte de la segunda parte. La generación de jugadas era la gran asignatura pendiente de los dos contendientes, si bien los locales comenzaban a hacerlo algo mejor en ese registro. Bidaidea era a su vez su mayor enemigo, pues a veces se complicaba en la salida de balón, concediendo demasiado espacio a su rival. Para colmo, en el 31’, los visitantes se adelantaban: Eduardo Maldonado volvía a anotar de disparo lejano, esta vez acomodando muy bien el cuerpo para que el balón se alojara en las mallas.

Faltaba un cuarto de hora y los de ciberseguridad entraban en un punto crítico. Debían arriesgar para no perder una vez más, pero con pies de plomo, ya que Publicis Groupe corría bien y podía firmar la sentencia al contragolpe. Los envíos a Luis López a partir de ahí se hicieron todavía más habituales. Al igual que en la primera parte, su calidad les permitía vivir instalados cerca de los dominios de Albert Rius. Nicolás del Río era el autor del 2-2 en una jugada embarullada. Los verdes hacían bueno el dicho de “a la tercera va la vencida”, ya que los dos intentos anteriores eran detenidos por el portero.

Le tocaba a los blancos serenarse y bajar la bola al tapete otra vez. Su faceta contragolpeadora no estaba siendo bien explotada. Sin embargo, ya no generarían prácticamente amenaza, debido en gran parte al buen trabajo defensivo de todos los efectivos de Bidaidea. En su lugar, serían los verdes quienes se adelantaran en el marcador. Luis López volvía a mojar para ser decisivo: se escapaba bien en el 1 vs 1 y no perdonaba en el mano a mano posterior, coronando el 3-2 que concedió una bombona de oxígeno para los suyos en un torneo que se les estaba atragantando.