J4 – The Cocktail vs Ecija

En una brillante segunda mitad, el conjunto verde, que no se despega de la cabeza del grupo 2, aplastó por físico y ocasiones a un rival que se desplomó tras el descanso y que se vio sometido a un acoso y derribo.

A base de cabezazos, The Cocktail derrumbó el muro de Écija. Uno construido a base de una pequeña dosis de fortuna al adelantarse sin haber comprado demasiados boletos y el buen hacer que favoreció este hecho. A base de empuje e insistencia, el conjunto local sacó partido de su supremacía física y dejó patente su superioridad en la segunda parte para volver a sumar su segunda victoria consecutiva y no perder la estela de la cabeza del Grupo 2, en el que ocupa la tercera posición.

Con The Cocktail con las riendas del partido dominando de forma autoritaria el duelo y empujando a su rival a área propia, gozó de las mejores ocasiones antes de verse sorprendentemente por debajo en el marcador. Después de un buen tiro de media distancia de Sergio Ruiz y una falta estrellada en el larguero por Álvaro Sáez, Fernando Prida dio constancia de que la justicia futbolística es caprichosa al aprovechar una acción aislada cuando se veía más próximo el 1-0 que el 0-1. Un despeje contundente, un control orientado y una volea con la zurda para alojarla en la red desde el pico izquierdo del área grande.

El gol tuvo un doble efecto. Mejoró sus prestaciones Écija, espoleado mentalmente por el gol, e inoculó el buen inicio The Cocktail. Con la balanza del choque equilibrada, el partido se abrió y con ello también el de las ocasiones. Fernando Prida tuvo otra para hacer el segundo tanto rojillo mientras los de verde seguían martilleando la meta rival y haciendo lucir a su portero, que desbarató dos tiros a bocajarro de Darbooy Amir y Álvaro Sáez. No pudo hacer nada sin embargo ante el único fallo de concentración de su defensa, que sería la llave del partido. Jorge Jiménez aprovechó un error en la salida de balón, con el equipo esperando con demasiada ansia el descanso, y ejecutó desde la frontal, adornado por la estatua del meta.

Con ese gol trepó The Cocktail el muro moral de verse por debajo de forma injusta y con una dosis extra de arrojo y osadía, volcó rápido el partido a su favor por la vía rápida tras la segunda mitad, que amaneció con otro paradón de puros reflejos a Jorge Jiménez. Vacío el tanque de gasolina de Écija, se vio obligado a preponderar la defensa que el aumento de su botín. Por ello, los locales, que vieron con el primero tanto que podían hacer daño de esa manera, optaron por sacar el fusil de largo alcance. Un balón repelido tras un saque de esquina y muerto en la frontal fue aprovechado para ser conectado con el empeine del pie derecho de Álvaro Sáez para poner en ventaja a los suyos.

No tardó ni cinco minutos en ponerle la puntilla al partido Jorge Jiménez, este vez con otro tanto desde fuera del área, pero con dificultad añadida. Condujo desde campo propio y ante el bosque de piernas rivales, consiguió fabricarse el hueco para mandarla al fondo de la red. A partir de ahí, con su rival herido y agonizando, The Cocktail olió sangre y no dudó en tirarse a la yugular. Álvaro Sáez la estrelló en el larguero casi desde su campo y Sergio Ruiz estuvo a punto de unirse a la fiesta de haber definido bien ante el portero tras un pase entre líneas. Otra mano salvadora a tiro lejano de Javier de Miguel del arquero de Écija, protagonista de evitar una goleada mayor, evitó otro tanto. Pero no pudo hacer nada ante la gran definición de Sergiy Alonso tras una buena jugada colectiva, el gol que pondría el sello al choque.