Robert Walters vs Deloitte GT

Los locales se marcharon al descanso con un 1-4 en contra y le dieron la vuelta al marcador con una segunda parte imperial en la que acorralaron a los visitantes. Como ya sucediera en la anterior eliminatoria, los nueve metros sonrieron a Robert Walters y fueron crueles con un Deloitte GT que envió un balón al poste en el minuto 50. Bricoesfera, quizás el gran favorito, será su próximo rival.

Nunca hay que rendirse. Lo demostró Robert Walters con una segunda mitad para enmarcar. Antes de que la épica se apoderara de un partido de auténtica locura, Carlos Armesilla y José Bofarull tuvieron la primera ocasión con una contra vertiginosa en la que ‘Bofa’ se topó con un enorme Antonio Puche, que envió el balón a córner. Tardó en animarse la cosa, pero cuando Deloitte GT abrió la veda no hubo parones. De hecho, Manu Riveiro respondió a la acción de los visitantes con un golazo. Control al aire y, a bote pronto, puso el balón en la escuadra ante la estatua de José Esparza, que nada podía hacer ante la precisión del tiro.

Riveiro y Zaballa fueron los grandes animadores de su equipo. El defensa, participativo en todas las zonas del terreno de juego, también lo probó con un remate lejano que se marchó ligeramente por encima del travesaño. Reaccionó Deloitte con el golazo de Carlos Armesilla. El mejor de los visitantes salió con potencia desde atrás y le pegó desde poco más atrás de la frontal del área para ponerla pegadita al palo. El gol dio confianza a un Deloitte que, desde el tanto, no paró de generar ocasiones. Bofarull hizo estirarse de nuevo a un Puche espléndido. Pero no tuvo nada que ver en el error del delantero en la acción posterior, quien perdonó cuando el guardameta estaba vencido.

Al ida y vuelta le prosiguió un remate de Manu Riveiro, que aprovechó el despiste defensivo de Deloitte y casi sorprendió con el gol. Fueron de los pocos sustos que tuvieron los visitantes tras el gol, porque Carlos Armesilla volvió a perdonar el 1-2 con un remate forzado tras una jugada espectacular de Óscar Gómez. El gol llegó y lo hizo hasta en tres ocasiones. El segundo para Deloitte fue obra de Juan Sevilla. El extremo perdonó en primera instancia, pero a la segunda, tras otra larga jugada de elaboración de su equipo, definió cruzado para adelantar a los suyos tras una gran asistencia de Armesilla.

Solo dos minutos más tarde llegó el tercero tras una jugada muy extraña, en la que Óscar Gómez rescató un rechace de un balón dividido en la medular que sorprendió a Puche y pilló descolocado al guardameta. Óscar solo tuvo que empujarla. Justo al filo del descanso, José Bofarull ponía el cuarto, que parecía sentenciar la eliminatoria. El mismo ‘Bofa’ inició la jugada con una recuperación a mitad de campo, cedió a Óscar Gómez en la banda izquierda y este le sirvió la asistencia. El ’11’ no falló con todo a favor.

Lejos de amilanarse, Robert Walters encaró la segunda mitad con el chip cambiado. Fueron los grandes dominadores y aprovecharon los goles para meter presión a Deloitte, que terminó en su portería agazapado. A los tres minutos de la reanudación, Jaime Zaballa recortó distancias con un gol tras recuperación en zona comprometida y poniendo el cuero con rosca al segundo palo. Poco después, el mismo Zaballa volvería a intentarlo con un remate de zurda que rozó el palo. Reaccionó Deloitte con una acción de mano a mano entre Óscar Gómez y Puche que el delantero envió, de nuevo, fuera.

Ya en los instantes finales, Manu Riveiro acercaría a los suyos más a la remontada con otro golazo. El delantero recibió tras un córner en el vértice del área, recortó hacia afuera para perfilarse a la pierna derecha, y de interior, la cruzó perfecta. El otro hombre de la noche, Jaime Zaballa, culminaría la gesta con un forcejeo de espaldas en el que estuvo más listo que el defensa. Allí se marchó de Esparza y marcó a puerta vacía. Tras el empate, los dos equipos se dedicaron más a defender y a proteger el empate para resolverlo todo en los penaltis. Pero Óscar Gómez, en la última jugada del partido, envió el balón al palo. El destino fue cruel con Deloitte GT, que acabó derrotado en los penaltis tras fallar una de las tres penas máximas y se despide después de un torneo encomiable.