J1 – Grupo Social Once vs Sanitas Smile

La Copa Apertura Urban Sports Club comenzó con un partido igualado que se llevó el equipo que más busco la portería rival. El Grupo Social Once se mantuvo con vida ya que Myrsini Ligydaki tuvo una noche estelar y evitó la goleada con múltiples paradas.

La temporada femenina 21/22 echó a andar en la tarde de ayer con un partido de lo más apasionante, donde las chicas se dejaron todo en el césped del Luis Aragonés, y las familias daban color a una grada que no quería perderse la vuelta del fútbol femenino a Fútbolempresas. El choque arrancó con una tendencia que se iba a repetir durante los 50 minutos de juego, Sanitas pretendía llevar la voz cantante con el dominio del balón y Grupo Social Once aguardar su momento, defender su portería y aprovechar algún despiste visitante para tratar de hacer daño a la contra. Así pues, las primeras llegadas fueron de color rosa, que buscaban con ahínco estrenar el casillero de goles a favor.

Elena Zamorano no tardó ni tres minutos en hacerse con el centro del campo, y a su alrededor se movían el resto de compañeras, deseosas de recibir el balón para mandarlo al fondo de las mallas. Y ahí fue donde apareció la mejor jugadora del partido, demostrando que ha llegado a la competición muy en serio y con ganas de tener a su equipo metido en partido el tiempo que haga falta. Me refiero a la portera local Myrsini Ligydaki, que, en su debut, y desde el tramo inicial del partido, comenzó a demostrar que tiene una batería enorme de paradas.

Pero claro, ante tanto acercamiento, el gol de Sanitas terminó llegando. Tras un saque de banda de las visitantes, la zaga blanca no se puso de acuerdo para achicar agua, y entonces apareció la brújula de las rosas, Elena Zamorano, para aprovecharse del despiste y mandar el balón a dormir dentro de la portería. 21 minutos había costado abrir la lata, pero Sanitas recogía los frutos que llevaba un buen rato plantando.

En la segunda parte vimos más de lo mismo, aunque se podía apreciar que Grupo Social Once estaba más ordenado y mejor plantado sobre el campo, algo que dificultaba las posesiones visitantes y provocaba que las blancas pudiesen salir con más efectivos al contragolpe. Contraataques que Sanitas trataría de detener, cargándose de faltas y dando opciones a sus contrincantes, que tenían en Melisa Velázquez y Raquel Fuentes dos fantásticas tiradoras. De hecho, esa fue la principal baza de las locales, el balón parado que a punto estuvo de llevarlas al gol del empate.

Sin embargo, los acercamientos más claros seguían siendo rosas, que por medio de sus jugadoras de más calidad llegaban a situaciones de peligro dentro del área, ocasiones no lograban culminar con un gol que les aportara tranquilidad. Y bien por falta de puntería o por culpa de Myrsini Ligydaki, que seguía a lo suyo, el duelo llegó vibrante a los últimos minutos, con solo un gol de diferencia y con la sensación de que todo podía pasar.

Grupo Social Once se fue a por el gol del empate cuando restaban cinco minutos, y al final, cuando llega el momento de jugársela, pueden ocurrir dos cosas, que el irse arriba te haga marcar o que te cojan descolocado y te sepulten. En este caso ocurrió lo segundo. Beatriz Gallego remató un centro desde la izquierda, Myrsini Ligydaki la sacó con el pie, pero en segunda instancia, y de rechace, la número 9 de Sanitas hizo el segundo y definitivo 0-2 para poner calma y finiquitar cualquier opción de remontada. Sanitas logró así sumar el primer +3 de la temporada frente a un combativo Grupo Social Once que deberá esperar una jornada más para intentar conseguir sus primeros puntos.