J2 – EY Advisory vs Deloitte

Los auditores han comenzado el Torneo Apertura completamente embalados y le endosaron un contundente 0-9 a EY Advisory. Los debutantes no pudieron hacer nada ante el ciclón de Deloitte.

EY Advisory debutaba esta temporada recibiendo una visita más que complicada para cualquier equipo. En la segunda jornada de la campaña, Deloitte acudía al Centro Deportivo Luis Aragonés como visitante, donde ya se sienten como en casa. Los locales empezaron el encuentro con mucho entusiasmo, pero no tardaron en conocer las armas de Deloitte. En el minuto 9, Antonio Albalá inauguraba el marcador con un potente remate de cabeza tras un error en las marcas que le permitió cabecear completamente solo desde el segundo palo.

El crack de Deloitte no tardaría en volver a intervenir en una jugada de gol. Albalá recibió el balón en el borde del área, arrancó amagando el disparo y trató de asistir a un compañero, pero Gabriel Moreno cortó el pase y el balón quedó muerto dentro del área. Fue entonces cuando apareció Ignacio Díaz para batir a Javier Gárate con un sutil taconazo que duplicaba la distancia en el marcador. El 0-2 se mantuvo hasta el final de la primera mitad, ya que a EY Advisory le costaba un mundo llegar a los dominios defendidos por Pablo Álvarez.

Deloitte se había relajado tras el tanto de Ignacio Díaz y los locales salieron dispuestos a aprovecharlo en el segundo tiempo. EY Advisory estuvo a punto de recortar distancias gracias a un buen disparo de Javier Villen que acabó en un córner que les brindó una segunda oportunidad. Tras sacarlo en raso al corazón del área, Pablo Blanco contactó con el esférico de primeras, pero no fue capaz de dirigir el cuero lejos del alcance del guardameta rival. Las ocasiones empezaron a llegar gracias a un cambio táctico mediante el cual Javier Garate salía de la portería y se situaba al frente del ataque. Su poderío ofensivo no tardó en hacerse notar y protagonizó un zurdazo muy ajustado que obligó a Pablo Álvarez a emplearse a fondo.

Esta ocasión despertó a los chicos de Deloitte, que  se dieron cuenta de que la renta que habían obtenido no era tan holgada como pensaban. Los auditores se pusieron el mono de trabajo y se lanzaron sin piedad hacia la portería contraria. El físico de los jugadores de EY Advisory comenzó a sufrir sus primeros estragos, se partieron las líneas y Deloitte exhibió sus tremendas cualidades goleadoras a partir del minuto 32. Antonio Albalá dribló a dos contrarios, pisó área y batió a José Luis González con un disparo muy ajustado a la cepa del poste. Cuatro minutos después, Ismael González quiso redondear su gran partido en defensa y se sumó a la fiesta goleadora con dos disparos muy precisos, uno desde la media luna del área y el otro desde el vértice derecho.

EY Advisory estaba completamente hundido física y anímicamente, algo que aprovechó Deloitte para pegarse un festín. En un balón largo dirigido hacia la portería de los locales, José Luis González y Pablo Blanco no se hablaron, chocaron entre ellos y el balón le cayó a Carlos Ramos, que anotó el 0-6 a puerta vacía en el minuto 44. Dos minutos después, Carlos volvió a estar en el lugar y en el momento oportuno para aprovechar un rechace tras una buena parada de José Luis.

El tramo final del encuentro estaba siendo una pesadilla para Ey Advisory, que se refugió tras los guantes de José Luis para que la goleada no fuera mayor. A la contra, Gabriel Moreno se marchó de su marca para quedarse en un tres contra uno frente al guardameta de Deloitte, pero no fue preciso en la conducción y el balón se marchó por la línea de fondo, desvaneciéndose la oportunidad de anotar el gol del honor. Javier Garate también trató de alcanzar esa mínima recompensa con un potente disparo a balón parado, pero Pablo Álvarez estuvo atento para detener el cuero.

Corría el minuto 49 del encuentro y el colegiado Jesús Jiménez ya miraba su cronómetro, pero el tándem Albalá-Márquez quería más. Alberto Márquez recorrió la banda izquierda, llegó hasta la línea de fondo y colgó un balón medido al segundo palo para que Antonio Albalá pudiera rematar a placer con un cabezazo picado que se convertía en el 0-8. Unos segundos después, Albalá recogió el balón en el centro del campo, levantó la cabeza y le devolvió la asistencia a Márquez, que se quedó frente al portero, le recortó y anotó el noveno gol del encuentro para sellar una victoria más que merecida.