Cetelem vs Grupo Social Once “B”

La final que enfrentaba a ambos elencos se saldó con victoria visitante en un choque lleno de emoción, tensión, electricidad y ocasiones. El ambiente en la grada acompañó para vivir un partido precioso.

El partido decisivo para decidir quien era el mejor equipo de la segunda categoría de la Liga Clausura arrancó a las 21:00 en el Luis Aragonés. Dos equipazos se enfrentaban en busca del campeonato, tras una temporada enorme y con ganar de culminar en este partido a las puertas de junio. Colorido en la grada y gozo en el verde, donde los nervios desaparecieron con el pitido inicial, el cual dio paso al rock.

Los primeros compases fueron de tanteo, con el equipo local algo mejor plantado, sabedores de que la experiencia de los suyos, en una final, podía ser definitoria ante la juventud rival, por lo que Cetelem buscaba llevar el ritmo del choque para que no se volviera en un ida y vuelta donde tenían todas las de perder. Y en ese juego pausado y de posición, Fran Martín entró en el área, recibió el cuero y un rival trató de arrebatárselo con la planta del pie excesivamente elevada. Libre indirecto para los verdes que Alejandro Alonso se encargó de transformar para colocar el primero del duelo.

Un gol que dio alas a los visitantes, y es que Grupo Social Once B comenzó a crecer en el juego tras verse por debajo, y poco después de superar el ecuador de la primera, el MVP indiscutible de la final, Mario Valverde, aprovechó un balón que pasaba por el área para estirar la pierna y empatar la contienda con una anotación digna de un ratón de área.

Ahora sí, con todo igualado, daba comienzo otro mini partido dentro de la final, pues los algo más de diez minutos que restaban para el descanso iban a marcar la tendencia del choque. Ambos equipos crecieron en los minutos finales, mejorando sus prestaciones ofensivas y tratando de cimentar bien las bases desde la retaguardia para evitar sustos inoportunos, pero lo cierto es que cuando el genio sale de la lámpara no hay defensa que lo detenga, y eso fue exactamente lo que pasó con el segundo tanto blanco. Mario Valverde culminó una gran jugada colectiva para mandar a los blancos uno arriba al entretiempo.

El segundo acto siguió pareciéndose a lo visto en el tramo final de la primera, pero con algo menos de revoluciones por suerte para el colegiado, ya que, de haber seguido a ese nivel de voltaje, es probable que más de un jugador no hubiera terminado la final. Cetelem buscaba el empate por todos los medios, pero se encontró con otro tanto de Grupo Social Once B a los once de la reanudación. Nicolás Martínez aprovechó un contragolpe para definir a la perfección delante del arquero y poner distancia en el luminoso.

Le tocaba arriesgar al equipo local, que subió sus líneas y se desprotegió en demasía, pero no le quedaba otra a diez minutos del final, por lo que a base de empuje y buen juego comenzaron a encerrar y bombardear a sus oponentes. Fran Martín fue el mejor jugador verde durante todo el partido, y terminó de dejarlo claro cuando hizo el gol de la final y uno de los tantos de la temporada, con un disparo lateral que pegó en la escuadra contraria y se coló dentro para recortar distancias. Se lo creía Cetelem, que a base de empuje sacó un penalti en un balón largo y un forcejeo en el área y que Álvaro Morales se encargó de transformar para empatarlo todo de nuevo y colocar un escenario precioso a tres del final.

Y cuando todo tenía pinta de que iba a resolverse desde el punto de penalti, una desconexión de Morales, provocó su expulsión por doble amarilla y un lanzamiento desde el punto fatídico para Iván Holgado, que no titubeó y la mandó a guardar. Uno menos Cetelem y por debajo en el marcador a falta de un minuto, la machada era casi imposible, y más cuando Mario Valverde culminó su hat-trick y dio carpetazo a la final, logrando llevar a Grupo Social Once B a levantar el trofeo unos minutos después.