J1 – BNP Paribas Securities vs HAYS

El guardameta visitante dio toda una exhibición de paradas milagrosas y mantuvo en pie a su equipo frente a un BNP que fue dueño y señor de la primera mitad y que pudo golear, pero que dio una imagen totalmente contrapuesta en los segundos 25 minutos

Quien hubiera visto la primera mitad del BNP Paribas Securities – Hays hubiera pensado que los locales golearían, pero Hays dio toda una lección de supervivencia, sustentada en su guardameta, Juanjo Riber, líder de su equipo con sus constantes órdenes y sus gritos de ánimo desde la portería. El portero visitante tuvo mucho trabajo. BNP avisó en el primer minuto con una ocasión de Jorge Fernández a la salida de un córner. El defensa envió a las nubes un balón que ni él se esperaba que le caería en el punto de penalti. En el minuto 2, los locales ya se habían puesto por delante en el marcador con un zapatazo de Pablo González, quien había recuperado tras una presión asfixiante sobre la salida de balón de Hays y reventó el esférico, que golpeó en el palo antes de entrar.

Los verdes salieron en tromba y no dejaban respirar a su rival. El tridente del centro del campo, formado por Jon Hernández, Pablo González y Sergio Lázaro-Carrasco, era una fábrica de jugadas constante que engulló por completo el área de Hays. El mismo Sergio puso a prueba a Juanjo Riber con un lanzamiento de falta que despejó el guardameta. También pudo marcar el segundo el goleador Pablo González si materializa otro tiro desde la frontal que rozó la madera. El monólogo era evidente y Hays no salía del área más que cuando despejaba balones largos. Pero los blancos forzaron una falta en una de sus pocas salidas. Solo a balón parado podía llegar el gol. Alejandro Martín puso un balón que no encontró rematador en el área, pero que sorprendió a Juan Fernández y supuso el 1-1.

El gol fue una manera de ganar tiempo para Hays. Los visitantes aún no se habían encontrado en el partido y sus mejores hombres, como Alberto Casado o Federico Navarro, seguían desaparecidos. Seguía apretando BNP, que falló dos ocasiones claras. La primera la protagonizó Jorge Fernández, quien falló incomprensiblemente en boca de gol. Luego, con otro pase filtrado espectacular de Sergio Lázaro-Carrasco que dejó solo a Pablo González, quien se topó con el muro Juanjo Riber. Hays tuvo otra gran oportunidad con un remate de Emilio Carnevali. Solo en el área pequeña, el centrocampista remató desviado un saque de banda. Volvió a golpear BNP, que bien merecía su premio, con el gol de José Miguel Barros. El rápido delantero hizo bueno un centro de Pablo González desde el sector izquierdo empujando a la red con la puntera y superando la salida de Juanjo.

Así terminaba una primera mitad en la que, lo mejor para Hays, era perder por solo 2-1. No obstante, en la segunda mitad se cambiaron los papeles. A BNP no sabía por dónde le llegaban. Hays cambió el planteamiento en busca del empate y su equipo lo agradeció. Fueron sus mejores momentos. La primera la tuvo Javi Verde, con un desmarque en diagonal a la espalda de la defensa que no terminó con gol porque su disparo iba centrado. El mismo Javi Verde protagonizó la siguiente oportunidad, con un centro raso desde la izquierda que se paseó por el área pequeña con mucho suspense.

Replicó BNP con un tiro de José Miguel Barros tras una jugada que él mismo había iniciado con un caño precioso. Su disparo, ajustado al palo, lo desbarató Juanjo Riber con una mano espectacular. Y solo un minuto después, Alejandro Martín calcó el gol que había marcado en la primera mitad. Otra falta a la altura del medio campo que no encontró rematador, volvió a despistar a Juan Fernández y puso, esta vez, un gol muy merecido por parte de los visitantes. BNP mostraba su desesperación por medio de conversas, buscando explicaciones a lo que estaba ocurriendo en la segunda mitad. Pero, simplemente, era Hays quien había dado un pasito adelante e imprimido otro ritmo al encuentro. Los verdes tuvieron la más clara poco después del empate.

De nuevo, el salvador Juanjo Riber salvó a Hays con una doble parada milagrosa. Del gol cantado de BNP, al gol de Hays. Un pase a medida de Fede Navarro lo resolvió Henri Grundman rematando a placer, superada ya la salida de Juan Fernández. Hays había conseguido lo más difícil: remontar un partido que empezaron cuesta arriba y en el que tuvieron que sostener las acometidas de BNP en la primera parte. Pero todavía hubo tiempo para ver a Juanjo Riber salvar a los suyos por enésima vez. Una jugada en banda de Pablo González a lo velocista lo volvió a dispersar el guardameta haciéndose gigante cuando el mediocentro cargaba la pistola. Murió el encuentro y el banquillo de Hays enloqueció con la trabajadísima victoria de su equipo.