Air Nostrum vs Robert Walters

En un auténtico partidazo en el que destacó el duelo de laterales entre Zaballa, con dos goles, y Befán, con un hat trick, ambos equipos demostraron su enorme potencial ofensivo y sus carencias atrás. El 8-8 final dio paso a una tanda de penaltis en la que Antonio Puche dio el pase a los octavos de final al detener una pena máxima a José Eugenio Guerrero.

Partido frenético, la primera piedra para alcanzar la final de la 1ª División de Plata fue un espectáculo puro. Ambos equipos se exprimieron en tareas ofensivas y demostraron su gran potencial de cara a portería, aunque no mostraron las mismas prestaciones atrás. Pronto golpearon los visitantes por partida doble y por parte del mismo jugador. Yerai Pereda, en dos minutos, daba ventaja de dos goles en el encuentro y hacía presagiar un paseo de los verdes. El primer gol llegó a la altura del punto de penalti tras dos recortes que dejaron al 17 toda la portería para reventar el cuero y adelantar a los suyos. En el segundo, más bien le robó el tanto a Iván Figueiras, que ya había superado a Gonzalo Revuelta.

El partido no estaba para especulaciones y Air Nostrum respondió con un Pablo Befán que no encajó muy bien la caraja inicial de su equipo. El lateral la rompió en un rechace que pilló a contrapié a Antonio Puche. Solo dos minutos después, una gran jugada de tiralíneas protagonizada por Sergio Mayero acabó significando el empate. Trepidante, a pesar de que en el ida y vuelta de la primera mitad también hubo errores. Alejandro Aldanando perdonó un mano a mano para Air Nostrum y Yerai Pereda hizo lo propio aunque ya con el portero superado.

Ya en el minuto 11, Pablo Befán ponía por delante a los suyos con un cabezazo, que remató a un pase largo desde la defensa. El mismo Befán protagonizó la jugada del cuarto gol, con una gran acción individual. El 2 cedería a Alejandro Aldanando para que, de primeras, batiera a Antonio Puche. La exhibición del lateral de Air Nostrum iba a tener un enemigo inesperado. Jaime Zaballa también fue un cuchillo por el sector derecho, cada ataque suyo era peligro asegurado. En cuanto arrancó la moto el equipo lo agradeció, primero disparó por arriba del larguero en una jugada en la que nadie podía tumbarlo. Acto seguido, en el minuto 20, sirvió en bandeja a Ignacio Tello para recortar distancias.

Se la cedió al mediocentro, quien tampoco lo hizo nada mal. Se perfiló a su pierna buena y la puso con rosca lejos del alcance del portero. El mismo Zaballa ponía el empate de penalti al filo del descanso. Pero no acabaría aquí el show de Zaballa, que además regalaría el quinto a Tello otra vez. Una jugada saliendo desde atrás en la que dejó a medio Air Nostrum en el camino que culminó con su pase de la muerte y el gol de Tello. Pero no quería ser menos Pablo Befán, el lateral izquierdo culminó su ‘hat-trick’ con el gol que ponía de nuevo las tablas en el marcador. De empeine y pegada al primer palo.

Fue entonces cuando Jaime Zaballa apareció de nuevo recogiendo el testigo con un golazo de volea que devolvía la ventaja. Una auténtica pesadilla para Air Nostrum, que no tardó en volver a igualar la contienda con el gol de Sergio Mayero gracias a un gran remate cruzado desde la frontal. Yerai Pereda volvía a dejar a los suyos con ventaja con un mano a mano y un remate inapelable. Pero Air Nostrum dio la vuelta al marcador en los instantes finales. Simón Castelló, que poco antes estaba reclamando un penalti, disparo casi desde el centro del campo, su tiro rebotó en un rival y eso fue clave para que no llegara Puche.

Alejandro Aldanando aprovechaba un fallo defensivo de Robert Walters en los instantes finales y anotaba el que parecía iba a ser el 8-7 definitivo. Sin embargo, José Cabo, in extremis, regaló a Robert Walters la posibilidad de decidir en los penaltis con un gol de mucha fe, en la que salió airoso de infinitos rebotes y definió ante la salida de Gonzalo Revuelta. En la lotería de los penaltis, Antonio Puche hizo los deberes deteniendo el disparo de Guerrero y Jaime Zaballa selló el tanto definitivo que daba el pase a los suyos a los octavos de final. Enorme espectáculo que bien merecía a ambos en la siguiente ronda.